Como amante de la naturaleza, con años de experiencia observando e interactuando con ardillas de todo el mundo, puedo decirte definitivamente: sí, las ardillas comen hojas. Habiéndolas visto alimentarse de hojas en su hábitat natural y observándolas mordisquear el follaje del jardín, sencillamente no hay duda. Pero saber esto es sólo la mitad de la batalla: también debes aceptar que, si quieres mantener tus plantas a salvo de las ardillas hambrientas, tendrás que tomar ciertas precauciones.
Sí, ¡las ardillas comen hojas! Sobre todo comen hojas de roble, haya y avellano. Sin embargo, también les gusta comer otros tipos de follaje, como flores, capullos y brotes.
¿Comen hojas las ardillas?
Las ardillas pueden causar estragos en tu jardín o patio, pero conocer su dieta típica es clave para mantenerlas alejadas. La dieta típica de una ardilla consiste en una serie de alimentos como frutos secos, frutas, semillas, hongos e incluso pequeños insectos o huevos de pájaro. En algunos casos también consumirán hojas de árboles, sobre todo si no hay otras fuentes de alimento disponibles.
¿Cuál es la dieta típica de las ardillas?
Una dieta típica para una ardilla adulta incluye elementos como: frutos secos como avellanas y nueces; frutas como manzanas, melocotones, ciruelas; semillas de coníferas como piñas de pino y abeto; setas y otros hongos; huevos de pájaros; y ocasionalmente pequeños insectos. Pero, ¿qué pasa con las hojas? Aunque es tentador creer que las hojas de los árboles forman parte del menú habitual de los escualos, no es necesariamente así.
- En épocas en que otras fuentes de alimento escasean o no están disponibles, las ardillas pueden recurrir al consumo de follaje arbóreo.
- Aunque no suelen depender de grandes cantidades en su dieta.
Las hojas de los árboles atraen a los roedores
Es posible que, al igual que los humanos comen ensalada por comodidad y a pesar de su falta de valor nutritivo, las ardillas vean las hojas como una fuente fácil de nutrición si no hay otras opciones mejores cerca. Esto significa que durante los periodos en que los árboles cercanos se han despojado de su abundancia de frutos, las hojas pueden proporcionar un valioso aporte a la dieta de estas criaturas.
Lo mismo se aplica a las zonas con densa cobertura de follaje, donde las hojas pueden acumularse más fácilmente debido a los elementos que las frutas o los frutos secos podrían permanecer secos durante largos periodos.: Los frutos no durarían mucho, mientras que las ramas frondosas tienden a conservar sus nutrientes durante más tiempo, incluso después de caerse del árbol madre.
Roer, consumir y hojear el follaje
Roer, consumir y hojear el follaje son actividades conocidas de las ardillas. Las hojas de los árboles pueden ser un tentempié apetecible para estos roedores hambrientos. Se las ha visto arrancar la corteza de las ramas, asaltar árboles frutales e incluso comerse los brotes de los árboles. Además, pueden mordisquear flores y otros arbustos cuando se les presenta un bocado apetitoso. Para proteger tus plantas de estos bichos, considera poner en tu jardín elementos disuasorios como vallas o comederos para pájaros tratados con pimienta de cayena.
¿Pastorean hojas o se alimentan de bayas?
La vegetación frutal puede ser preferible a la frondosa, ya que su dulzura ofrece más ventajas nutricionales que la amarga verdura culinaria. Dicho esto, siempre hay excepciones: algunos animales pueden tener antojo de verdor más tarde, durante los meses de verano, cuando los árboles frutales se vuelven estériles, mientras que las plantas herbáceas perennes siguen manteniendo los niveles de humedad y ofrecen tentempiés alternativos durante las estaciones más cálidas. Todas estas variaciones dependen de las preferencias individuales, también según la región, el tamaño de la población que habita las fronteras geográficas, entre muchas otras. Todos estos factores influyen en la frecuencia con la que las criaturas se alimentan de materia vegetal de sabor desagradable, aunque la tendencia general parece ser bastante infrecuente.
Evita que las ardillas se coman las hojas de tu jardín
Mantener a las molestas ardillas alejadas de tu jardín y patio puede ser todo un reto. Afortunadamente, hay varios métodos que puedes utilizar para disuadirlas y proteger tus plantas. Algunas de las mejores formas de mantener alejadas a las ardillas son los elementos disuasorios naturales, las barreras físicas y las tácticas para asustarlas que emplean sonido o luz.
Hay varios elementos disuasorios naturales que pueden ayudar a repeler a las ardillas sin recurrir a productos químicos agresivos. Mantener el jardín limpio y ordenado puede disuadirlas de reunirse en primer lugar, ya que los jardines desatendidos ofrecen muchos escondrijos para las plagas.
Plantar hierbas aromáticas en el jardín, como albahaca o menta, puede enmascarar sus rastros de olor y dificultarles la búsqueda de comida o, peor aún, de refugio. Además, emplear un perro -o un gato- guardián también puede disuadir a las ardillas, ya que desconfían instintivamente de los depredadores más grandes.
Veamos ahora algunos de los mejores métodos para proteger tu jardín de las ardillas.
1. Cercado y otras barreras físicas
Una de las formas más eficaces de mantener alejadas a las ardillas es crear un obstáculo instalando vallas alrededor de la zona de tu jardín. Hay varios tipos disponibles, como redes de malla de plástico o metal (como la tela metálica), vallas de alambre de gallinero o redes de cerramiento hechas con fibras de polietileno de alta densidad que no dejan pasar a los roedores pero permiten el flujo de aire.
2. Tela metálica, malla gallinera y redes de cerramiento
Si quieres mantener a las ardillas alejadas de tus plantas, las barreras físicas como la tela metálica, la malla gallinera y las redes de cerramiento pueden ser lo que necesitas. La tela metálica es una malla de acero galvanizado con pequeños agujeros que proporciona una fuerte barrera contra conejos, gatos y otros animales pequeños.
La malla metál ica es una solución flexible pero duradera para cercar patios o jardines. Por último, una red de cercado proporciona protección contra aves grandes, como halcones y búhos. Todas ellas son excelentes opciones para controlar las plagas alrededor de huertos y parterres.
3. Rociadores para disuadir a las plantas de que lleguen
Otra opción es utilizar aerosoles de barrera sobre el follaje de las plantas que tengan olores fuertes, como el ajo o la pimienta de cayena. La mayoría de los repelentes dejarán un sabor desagradable en las hojas tras su aplicación, de modo que si un roedor intenta dar un mordisco, lo abandonará rápidamente debido a los sabores poco apetecibles.
4. Tácticas para asustar: los ruidos y las luces alejan a los roedores
Utilizar tácticas para asustar es uno de los métodos más comunes para evitar que las molestas ardillas se coman la vegetación. Utilizar ruidos y luces puede ser una forma eficaz de mantenerlas alejadas al tiempo que se permite a los pájaros alimentarse en paz. Estas técnicas pueden implicar agentes asustadores naturales o artificiales, como halcones, búhos, señuelos de depredadores o LED brillantes.
Los dispositivos ultrasónicos son una opción popular entre quienes buscan un elemento disuasorio electrónico con poco alboroto o desorden. Emiten sonidos de alta frecuencia que causan molestias a los animales que se encuentran dentro de su alcance -que difiere en cada dispositivo-, creando así una fuerte aversión a acercarse a la proximidad de la fuente de sonido.
Además, existen máquinas de ruido que imitan los ruidos de depredadores como coyotes y zorros para ahuyentar a los animales pequeños de jardines y céspedes. Las luces LED brillantes colocadas alrededor de las plantas también pueden disuadir a los roedores, ya que su parpadeo constante actuará como otro tipo de molestia.
Por último, también puedes asustarlos con aspersores que se activan con el movimiento, como el que se muestra a continuación:
5. Plantas repelentes que enmascaran los rastros de olor
El uso de hierbas aromáticas y arbustos en flor es otro método de éxito probado para ahuyentar a las ardillas visitantes de los arriates y arbustos. Las hierbas como el orégano, el perejil, el tomillo, la albahaca, el romero, la salvia y la menta contienen compuestos que enmascaran los olores tentadores para la fauna. Además, plantar arbustos aromáticos, como madreselva o arbustos de bayas, cerca de las zonas frecuentadas por las criaturas puede disuadirlas eficazmente de explorar nuevos lugares.
- El orégano, el perejil, el tomillo, la albahaca, el romero, la salvia y la menta contienen compuestos que enmascaran olores atractivos para la fauna.
- Plantar arbustos olorosos como la madreselva o arbustos de bayas cerca de las zonas frecuentadas por las criaturas puede disuadirlas eficazmente de hurgar en nuevos lugares.
Conclusión
En conclusión, la respuesta a la pregunta de si las ardillas comen hojas es sí, las comen. Aunque su dieta consiste principalmente en frutos secos, frutas e insectos, las ardillas a veces mordisquean hojas como fuente de alimento suplementario. Este conocimiento puede ayudarte a proteger tus plantas: considera la posibilidad de añadir algunas jaulas o mallas a prueba de ardillas para mantenerlas alejadas de tu precioso follaje.
Por supuesto, es esencial recordar que las ardillas son animales salvajes y deben ser respetadas en consecuencia. Asegúrate siempre de no exponerte -ni exponerlas- a sufrir daños cuando intentes mantenerlas alejadas de tu jardín. Pero si sigues estas pautas, no hay motivo para que tanto tú como las ardillas no podáis tener una relación pacífica que respete su comportamiento natural en torno a las plantas y las hojas.
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