Como amante de los animales y con años de experiencia en la observación del comportamiento de las ardillas, puedo afirmar con seguridad que es un hecho chocante pero cierto que ¡las ardillas comen lagartijas! En esta entrada del blog, explicaré por qué lo hacen, con qué frecuencia lo hacen y cuáles son las consecuencias. Sigue leyendo para saber más sobre esta intrigante cuestión: ¿las ardillas comen realmente lagartijas?

Las ardillas son omnívoras, lo que significa que disfrutan de una dieta compuesta por alimentos de origen animal y vegetal. Sin embargo, según una investigación realizada por la Global Wildlife Conservation, las ardillas no suelen consumir lagartos como parte de su dieta.

Sorprendentemente cierto: ¿Las ardillas comen lagartos?

Puede sonar descabellado, ¡pero la respuesta es sí! Se han visto ardillas comiendo lagartos y otros reptiles en zonas de todo el mundo. Este hábito alimentario puede ofrecer una fuente fácil de proteínas a las ardillas cuando escasean otros alimentos. Curiosamente, se sabe que algunas especies incluso almacenan vivas a sus presas reptiles para consumirlas más tarde.

Por supuesto, la dieta de una ardilla debe variar según la región en función de lo que haya disponible. En general, se alimentan de una amplia gama de frutos secos, frutas, verduras e insectos. Además, muchas ardillas también consumirán pequeñas cantidades de carne si está disponible.

Datos sorprendentes sobre ardillas y lagartos

Las ardillas y los lagartos pueden parecer enemigos improbables, pero a menudo comparten los mismos hábitats y tienen dietas similares. Aunque puede haber cierto solapamiento en sus fuentes de alimento, no es frecuente que las ardillas coman lagartos. Pero eso no significa que no se hayan acercado a ellas. He aquí algunos datos sorprendentes sobre las ardillas y los lagartos.

Hibernación: Los lagartos pueden sobrevivir a temperaturas bajo cero mejor que las ardillas gracias a un proceso metabólico similar a la hibernación llamado brumación.
Comportamiento social: Aunque muchas especies, tanto de ardillas como de lagartos, prefieren vivir solas, algunas forman colonias o grupos cuando se sienten amenazadas o buscan refugio.

¿Qué atrae a las ardillas de los lagartos?

Los beneficios termorreguladores de la captura de presas

El arte de cazar lagartos ha proporcionado a las ardillas numerosos beneficios termorreguladores. Como los lagartos son animales de sangre fría, pueden proporcionar una rápida ráfaga de calor y energía a sus depredadores. Además, las ardillas pueden beneficiarse de la inercia térmica que proporcionan las lagartijas; la temperatura corporal de las lagartijas tiende a seguir la del entorno más lentamente que la de los mamíferos de sangre caliente.

Gracias a este comportamiento depredador, las ardillas pueden calentarse rápidamente antes de participar en actividades físicas como escapar de posibles depredadores o perseguir a sus parejas. Además, cuando se consideran temperaturas extremas -tanto de frío como de calor-, se sabe que estos depredadores utilizan el calor corporal de sus presas para mantenerse cómodos independientemente de las condiciones ambientales.

Las ardillas son más listas que los reptiles venenosos

Las ardillas están muy adaptadas a la vida en la naturaleza y han desarrollado una serie de estrategias para protegerse de sus depredadores naturales, como los reptiles venenosos. En particular, han desarrollado una asombrosa capacidad para ralentizar sus movimientos cuando perciben peligro. De este modo, se vuelven prácticamente invisibles para sus depredadores potenciales. Además, al permanecer inmóviles durante largos periodos, las ardillas son capaces de mimetizarse con el entorno y dificultar su detección por reptiles venenosos como las serpientes.

Gracias a su increíble capacidad de velocidad y a sus reflejos sensoriales, que les permiten alertar rápidamente de los enemigos que se acercan, las ardillas a veces pueden incluso superar a estos reptiles atacantes o escapar de ellos alcanzando un lugar seguro donde esconderse y pasar desapercibidas.

Reducir la velocidad a una velocidad insuperable

Aunque escapar de los depredadores es algo que la mayoría de los animales entienden instintivamente, la investigación ha identificado varias estrategias inteligentes que las ardillas utilizan para maximizar sus posibilidades de supervivencia. A diferencia de otras especies que simplemente huyen cuando se ven amenazadas por lagartos o serpientes venenosas, las ardillas, en cambio, reducen drásticamente su velocidad -casi se detienen por completo- y luego reanudan gradualmente el movimiento antes de huir finalmente con la máxima velocidad y agilidad.

Esta estrategia dificulta la huida de la serpiente o el lagarto, pues no puede centrarse con precisión en su objetivo, ya que su visión se ve obstaculizada a distancias más cortas, lo que dificulta que el reptil rastree la ubicación de su presa. Esto da al roedor, que piensa con rapidez, tiempo suficiente para eludir el peligro hasta encontrar un lugar seguro donde esconderse y esperar a que pase cualquier amenaza potencial.

Muy adaptado a la caza

Dada la importancia de la caza para obtener fuentes de alimento en la naturaleza -sobre todo lagartos ricos en proteínas- en épocas de necesidad, los científicos creen que la evolución ha favorecido ciertos comportamientos entre los roedores como éste. Al aprender a qué distancia se encuentran los reptiles peligrosos antes de planear un ataque o huir, las ardillas tienen ahora más posibilidades de encontrar una presa antes de que se las coman a ellas.

Como cazadoras oportunistas que también necesitan materia vegetal en su dieta, se ha descubierto que especies como la ardilla gris (Sciurus carolinensis) realizan “actividades de túnel”, en las que cavan túneles bajo las copas de los árboles para dejar al descubierto escondites en los que pueden anidar diversos tipos de eslizones en el interior de ramas o troncos, facilitando así el acceso a estos ágiles cazadores en busca de comida.

Conclusión

En conclusión, la respuesta a nuestra pregunta de si las ardillas comen lagartijas es un sí rotundo. Aunque no es frecuente que una ardilla se alimente de una lagartija, sí que las consume ocasionalmente como parte de su dieta. Esto puede ocurrir cuando las lagartijas se acercan demasiado al lugar donde anidan, o cuando tropiezan con una lagartija que se mueve lentamente o está herida.

Comprender los distintos comportamientos y hábitos de estos animales garantizará que tu patio tenga mucha vida salvaje natural. Las ardillas no siempre son depredadoras, pero a veces nuestros pequeños amigos peludos pueden convertirse en cazadores oportunistas. Mantén el césped y el jardín bien cuidados, evita utilizar sustancias venenosas cerca de los animales salvajes y ¡disfruta observando la asombrosa fauna de tu patio!