Como amante de la naturaleza que tiene varios años de experiencia observando e interactuando con ardillas de todo el mundo, comprendo lo tentador que puede ser dar de comer a las ardillas salvajes. Pero es importante comprender que alimentarlas puede tener graves consecuencias y perjudicar tanto a los animales como a las personas. Por eso, en esta entrada del blog, voy a hablar de lo que necesitas saber sobre la alimentación de las ardillas, para que puedas tomar una decisión informada sobre tus acciones.

La alimentación suplementaria de ardillas salvajes es una actividad potencialmente peligrosa. Puede hacer que los animales se habitúen, es decir, que pierdan su miedo natural a los humanos y los comportamientos asociados, como huir o dar la alarma. Cuando los mamíferos pierden su cautela innata, pueden volverse demasiado audaces en sus intentos de acceder a las fuentes humanas de alimento, lo que da lugar a incidentes en los que las personas resultan heridas. Para evitarlo, se recomienda no alimentar ni engatusar nunca a los animales salvajes.

Alimentar ardillas: Lo que debes saber

La alimentación suplementaria de las ardillas salvajes es una actividad potencialmente peligrosa, ya que puede alterar el comportamiento de estos animales y perjudicarles tanto a ellos como a las personas. Este tipo de gestión de la fauna salvaje debe utilizarse con precaución, y requiere una comprensión básica de los riesgos asociados a la alimentación de animales salvajes. Es importante tener en cuenta el impacto potencial en los ecosistemas naturales, así como las distintas normativas que pueden aplicarse a la alimentación de ardillas salvajes.

Los riesgos de alimentar ardillas salvajes

Una consecuencia importante de alimentar a las ardillas es la habituación, lo que significa que se vuelven menos temerosas o recelosas de los humanos. Si una ardilla es alimentada repetidamente por la gente de una zona, puede sentirse demasiado cómoda cerca de los humanos y dejar de huir de ellos como harían otros animales no habituados. Esto podría provocar comportamientos agresivos hacia los humanos, o lesiones si el animal arremetiera contra ellos por haber sido alimentado a mano.

Otra consecuencia que debe tenerse en cuenta al considerar la posibilidad de alimentar a las ardillas salvajes es el aumento del riesgo de lesiones o muerte de otros animales. Si hay demasiada comida disponible en una zona, aumentará la competencia entre animales, lo que provocará peleas y lesiones debidas a disputas territoriales.

Habituación

Cuando los humanos alimentan a los animales salvajes, el animal puede aprender que los humanos son una fuente de alimento, lo que les hace abandonar su respuesta natural de miedo cuando aparece una persona. Cuando esto ocurre se conoce como habituación: la alteración del comportamiento causada por la exposición continuada a la presencia humana. Esto puede provocar un aumento de la audacia en las interacciones con los humanos y podría dar lugar a incidentes en los que las personas resulten heridas por los animales que buscan comida.

Lesiones a animales y personas

Interacciones entre depredadores y presas: Proporcionar sustento puede atraer a un gran número de presas potenciales a una zona ya habitada por depredadores. Esto aumenta las posibilidades de encuentros negativos entre depredadores y presas.
Riesgo de lesiones: Cuando compiten por recursos como comida, agua o espacios para dormir, pueden producirse peleas entre animales que pueden provocar lesiones graves o la muerte.
Seguridad humana: Una vez que las ardillas salvajes empiezan a depender de las fuentes de alimento proporcionadas por los humanos, pueden volverse demasiado atrevidas a la hora de buscar otros servicios. En los casos en que se alimentan a mano, esto podría provocar mordeduras o arañazos.

Conservación de la fauna salvaje y alimentación de ardillas salvajes

Es importante que quienes deseen alimentar a criaturas salvajes (sobre todo ardillas) comprendan que esta actividad tiene efectos tanto positivos como negativos sobre el medio ambiente y sus habitantes. Cada situación es única: quienes recurren a la alimentación suplementaria deben tener en cuenta todas las implicaciones posibles antes de ofrecer sustento, como por ejemplo si existen alternativas saludables para estos animales dentro de su propio entorno.

Hábitos de alimentación respetuosos

Cuando se trata de alimentar a ardillas salvajes, es importante hacerlo de forma que se respete su entorno natural. He aquí algunos consejos para garantizar unos hábitos de alimentación respetuosos:

¡No las alimentes en exceso! Proporciona a las ardillas la comida justa para no atraer a otros animales salvajes ni a posibles depredadores.
Ten cuidado con la comida que les das. Asegúrate de que sea adecuada para que la coman las ardillas, y evita los alimentos con azúcares y grasas añadidos.
Alimenta siempre a una distancia segura. No intentes acercarte demasiado ni tocarlas mientras comen, ya que esto puede causarles estrés y miedo.
Mantén limpia la zona después de dar de comer a las ardillas. Asegúrate de recoger de la zona toda la comida que no hayan comido o los envases desechados.

Qué dar de comer a las ardillas salvajes

Es importante tener en cuenta las necesidades nutricionales de las ardillas salvajes cuando les proporciones comida. Aunque es posible alimentar con el mismo tipo de comida a los pájaros de patio y a las ardillas, en realidad tienen necesidades dietéticas diferentes. Para las ardillas salvajes, ciertos alimentos son mucho más seguros y saludables que otros.

Alimentos naturales

La forma más nutritiva de alimentar a las ardillas salvajes es con alimentos naturales que contengan grandes cantidades de proteínas, grasas y carbohidratos. Esto incluye cosas como frutos secos, frutas, verduras, setas e insectos. Sin embargo, algunos alimentos naturales deben evitarse porque pueden no aportar suficientes nutrientes a una ardilla o incluso ser tóxicos.

Las cáscaras de huevo no aportan suficientes nutrientes y además pueden suponer un peligro de asfixia para los animales pequeños.
Algunas plantas, como la dedalera y los narcisos, pueden ser venenosas para las ardillas, por lo que es importante investigar qué es seguro antes de darles de comer.
El pan no es beneficioso desde el punto de vista nutricional, pues carece de suficientes grasas y proteínas.

Frutos secos

Los frutos secos como las nueces, las avellanas, las castañas y las almendras son grandes fuentes de nutrición para las ardillas salvajes. Se pueden presentar fácilmente en comederos con forma de pájaro o de cacahuete para mantener los frutos secos alejados de otros animales, como gatos y perros. Para que sean más nutritivos, los cacahuetes pueden remojarse en agua durante la noche para que se ablanden y sean más fáciles de digerir.

Frutas y verduras

A las ardillas también les gusta comer frutas y verduras frescas. Las bayas como las fresas o las frambuesas son especialmente nutritivas para ellas. Asimismo, la mazorca de maíz es un tentempié maravilloso que aporta muchos minerales, como magnesio y calcio. Otras verduras que les encantan a las ardillas son la calabaza, las judías verdes, las zanahorias, los pimientos, los tomates, los pepinos, las hojas de col y las espinacas.

Semillas

Las semillas de girasol son un excelente tentempié para las ardillas silvestres porque están repletas de energía. Pueden colocarse fácilmente en comederos diseñados específicamente para pequeños mamíferos. Si decides seguir este camino, opta por semillas de girasol de aceite negro porque ofrecen más nutrientes que las semillas rayadas.

Mazorcas de maíz

Una de las golosinas más populares entre las ardillas salvajes son, con diferencia, las mazorcas de maíz. Las mazorcas de maíz deben estar siempre frescas, ya que las mohosas presentan un riesgo potencial de intoxicación alimentaria. Otra precaución es evitar alimentarlas con mazorcas predesgranadas, ya que no contienen todas las vitaminas y minerales necesarios de las mazorcas frescas.

Agua

Las ardillas necesitan acceso al agua como cualquier otro mamífero para mantenerse hidratadas. Un pequeño plato lleno de agua fresca será suficiente o, si prefieres algo más creativo, puedes optar por una pileta para pájaros, siempre que sea lo bastante poco profunda para que no suponga un riesgo de ahogamiento para la fauna.

Alimentar pájaros en el jardín o alimentar ardillas silvestres

Alimentar a los pájaros del jardín es una actividad cada vez más popular y, si se hace correctamente, puede ayudar a alimentar a diversas especies. Sin embargo, al proporcionar alimento a las ardillas silvestres, hay varias diferencias clave que deben tenerse en cuenta para hacerlo de forma responsable. Las diferencias en las necesidades nutricionales y las normativas políticas son consideraciones especialmente importantes.

Diferencias en las necesidades nutricionales

Las ardillas silvestres necesitan más proteínas que las aves de traspatio: frutos secos, semillas y carne, como huevos cocidos, deben formar parte de la dieta del animal. Otros elementos naturales, como las mazorcas de maíz, también pueden ofrecer los minerales y vitaminas necesarios para los animales salvajes. Evita darles alpiste comprado en la tienda u otros restos de artículos domésticos comunes, pues carecen de los nutrientes necesarios para las ardillas.

Diferencias normativas

La mayoría de los municipios tienen leyes que prohíben alimentar a los animales salvajes, sobre todo a los que se consideran especies “molestas”. Esto incluye a coyotes, osos, ciervos y gatos callejeros, entre otros; sin embargo, muchas ciudades también consideran molestas a las ardillas salvajes por su riesgo de propagar enfermedades o asaltar jardines. Por tanto, antes de iniciar cualquier tipo de programa de alimentación suplementaria, es de vital importancia asegurarse de que es legal en tu zona.

Crear un buen hábitat para las ardillas salvajes

Para quienes suplementan la alimentación de las ardillas salvajes, también es útil crear o comprar un hábitat que permita al animal prosperar en su entorno natural. Los añadidos sencillos, como las cajas nido o los montones de maleza, pueden ayudar a crear entornos cálidos que proporcionen tanto una mayor protección contra los depredadores como lugares apartados de los humanos, en caso de que el animal se sienta demasiado cómodo con el contacto.

Cajas nido para ardillas

Una caja nido de buena calidad (o varias) servirá de santuario seguro para estas criaturas tanto en los meses de frío como en las épocas de mayor actividad de los depredadores, como el verano o el otoño, cuando animales más grandes y poderosos pueden intentar utilizar la guarida de la ardilla como propia. Asegúrate de elegir cajas hechas específicamente para ardillas que tengan orificios de entrada lo bastante grandes para el animal, pero lo bastante pequeños para que los depredadores no puedan acceder a ella.

Controla a las mascotas para mantener a salvo a las ardillas

También es crucial, si alimentas ardillas salvajes en tu jardín, mantener a las mascotas bien controladas en todo momento. Incluso los gatos domésticos -si se les alimenta regularmente- cazarán animales más pequeños, como pájaros y roedores salv ajes, cuando tengan la oportunidad. Además, asegúrate de que todos los contenedores de basura estén bien cerrados; la basura desatendida puede convertirse en un blanco fácil para la fauna carroñera.

Planta girasoles para las ardillas

Por último, una forma de proporcionar nutrición adicional de forma natural es plantar variedades autóctonas de girasol que florezcan durante los ciclos de finales de verano a otoño; esto también ayudará a los polinizadores que se alimentan de flores productoras de néctar, como las especies de vara de oro, algodoncillo y hierba de joe.

Beneficios de alimentar ardillas silvestres

Alimentar a las ardillas salvajes ofrece muchos beneficios. Ayuda a mantener a los animales sanos y bien alimentados, apoyando su hábitat natural como fuente de alimento. Además, puede proporcionar a los observadores una actividad agradable al aire libre que pueden compartir con la familia o los amigos. Proporcionando bocadillos ricos en nutrientes a las ardillas, mostrarás amabilidad con tus vecinos peludos y apoyarás a las comunidades locales de animales salvajes. Además, ¡verlas comer puede ser un espectáculo maravilloso!

Beneficios medioambientales

La alimentación suplementaria de las ardillas salvajes puede ser beneficiosa para el medio ambiente de muchas maneras. Una de ellas es proporcionar alimento a los animales durante periodos de penuria ambiental, como las sequías o un tiempo inusualmente frío. Al proporcionar alimento a las ardillas, les da la energía que necesitan para sobrevivir y reproducirse, asegurando que el número de su población se mantenga estable incluso en condiciones duras.

Además, las ardillas pueden ayudar a distribuir semillas por todo su hábitat. Son especialmente eficaces en la propagación de plantas autóctonas almacenando bellotas y otros frutos secos bajo tierra, a menudo llevando la semilla lejos de donde la encontraron originalmente. Esto ayuda en los esfuerzos de reforestación y fomenta una diversa gama de vida vegetal.

Beneficios para la salud

Alimentar a las ardillas salvajes puede ayudar a promover estilos de vida saludables tanto para los animales como para los humanos. Proporcionar a las ardillas alimentos nutritivos, como frutas y verduras, les ayuda a mantener una buena salud y les permite desarrollar todo su potencial.

Proporcionar una dieta equilibrada a los animales salvajes también es beneficioso para las personas que viven cerca de reservas naturales o bosques. Alimentar a los animales salvajes mantiene las poblaciones bajo control, reduciendo problemas potenciales como las enfermedades o la destrucción de cultivos o propiedades urbanas al mantener su número en equilibrio.

Beneficios sociales

Alimentar a las ardillas salvajes puede tener repercusiones sociales positivas en las comunidades locales. Ayuda a unir a la gente fomentando una apreciación compartida de la naturaleza y animándola a participar en tareas de administración que benefician a la fauna salvaje. Además, sirve como oportunidad educativa, ya que la gente aprende más sobre la importancia de conservar estas especies mientras participa en actividades que les proporcionan sustento.

Las organizaciones benéficas locales pueden beneficiarse de la implicación de la comunidad cuando la gente se une para comprar alimentos para las ardillas o colabora para crear hábitats que favorezcan el crecimiento de la población. Además, las empresas pueden obtener beneficios económicos creando comederos especialmente diseñados para el consumo de animales salvajes.

Compromiso comunitario

Cuando se trata de proporcionar sustento a las ardillas salvajes, existen numerosas oportunidades para la participación de la comunidad. Las personas que viven cerca de bosques o reservas naturales pueden aunar fuerzas con organizaciones benéficas locales que organicen actos como búsquedas del tesoro o paseos con expertos que hablen de las necesidades nutricionales de las especies silvestres.

Voluntariado: Las personas pueden ofrecer su tiempo para construir cajas nido o recoger alimentos, contribuyendo así a los esfuerzos encaminados a ayudar a mantener las poblaciones de animales salvajes.
Donaciones: Los donativos se destinan directamente a la compra de alimentos, como frutos secos y frutas, que ayudan a alimentar a las ardillas salvajes.
Actos: Los actos organizados son una forma estupenda de que las familias o los grupos de amigos participen en los esfuerzos de conservación, a la vez que aprenden sobre la importancia de preservar especies silvestres como las ardillas.

Educación y concienciación

La educación es clave para comprender la importancia de proporcionar sustento a las ardillas salvajes. Mediante presentaciones especiales o actividades interactivas organizadas por la organización local, las personas pueden aprender los fundamentos de la nutrición adecuada para las distintas especies y conocer los métodos adecuados para dispersar las fuentes de alimento a fin de no atraer a los depredadores.

Además, enseñar a los demás hábitos de alimentación respetuosos fomenta la responsabilidad al tiempo que garantiza que se siguen los protocolos de seguridad. La creación de zonas de hábitat y la colocación de carteles que informen a los transeúntes sobre las mejores prácticas al relacionarse con la fauna salvaje también pueden ayudar a concienciar sobre los problemas que afectan a estos animales.

Cómo alimentar ardillas salvajes con seguridad

Alimentar ardillas a mano

Alimentarardillas a mano puede ser una actividad divertida, pero es importante ser consciente de las posibles consecuencias. Tomar ciertas precauciones puede garantizar tu seguridad y la de las ardillas. He aquí algunos consejos útiles:

Evita el contacto directo con las ardillas, pues pueden volverse agresivas o morderte.
Selecciona alimentos seguros para las ardillas, como frutos secos, frutas y verduras.
No alimentes a los animales salvajes con chocolate, pan u otros alimentos poco saludables.
Pon comida en pequeñas cantidades para evitar atraer a otros animales salvajes o roedores.

Crear un espacio de alimentación seguro

Cuando alimentes a animales salvajes, la seguridad debe ser siempre tu máxima prioridad. Para garantizar que las ardillas se mantengan seguras y sanas, es importante proporcionarles un entorno seguro en el que puedan alimentarse sin miedo a los depredadores ni a la interferencia humana.

El primer paso para crear un espacio de alimentación seguro es limitar el acceso a otros animales. Como los depredadores, como los gatos y los perros, pueden suponer una gran amenaza para las ardillas salvajes, es importante asegurarse de que la zona en la que se alimentan está libre de este tipo de animales. Mantener a los gatos dentro de casa o confinarlos en un porche con mosquitera es una forma de reducir su acceso a la zona.

También es beneficioso proteger a las ardillas salvajes limitando el acceso de los seres humanos; utiliza vallas de malla metálica o barreras naturales, como arbustos y árboles autóctonos, para mantener a la gente alejada de la zona. Esto evitará que las ardillas se sobresalten con cualquier movimiento brusco y les permitirá seguir comiendo tranquilamente.

Limitar el acceso a otros animales

Para crear un espacio de alimentación seguro para las ardillas hay que limitar el acceso a otros animales. Esto puede conseguirse

Colocando el comedero o la comida en superficies elevadas, como una barandilla de terraza o un poste, lejos de depredadores como gatos y perros
Utilizando una malla metálica alrededor de la base del comedero para impedir que los trepadores alcancen el plato de comida
Asegúrate de que todos los comederos situados en el suelo están bien sujetos, para que no puedan volcarlos animales más grandes
Retirar la comida después de comerla, para que no atraiga a visitantes no deseados.

Limitar el acceso a los humanos

Cuando se alimenta a las ardillas, es fundamental limitar el acceso a los humanos. Para garantizar la seguridad tanto de las ardillas como de las personas, es importante mantenerlas alejadas unas de otras. He aquí algunos consejos para limitar el acceso:

Opta por un comedero colgante, como una cesta o un comedero de ventana, en lugar de dejar la comida en un plato.
Coloca el comedero en zonas de difícil acceso para las personas.
Mantén limpia y ordenada la zona alrededor del comedero para disuadir a los carroñeros.
Alimenta sólo a la ardilla con lo que pueda comer en un día, ya que las sobras atraerán a más animales y pueden provocar una superpoblación.

Qué evitar al alimentar ardillas silvestres

Al dar de comer a las ardillas salvajes, debes evitar algunas cosas importantes. Ante todo, nunca intentes alimentar a mano a ningún animal salvaje; no sólo carecen de la capacidad de comprender a los humanos a nivel emocional, sino que este tipo de comportamiento puede provocar un aumento de la agresividad. Los animales salvajes necesitan su miedo natural a los humanos para mantenerse a salvo.

Además, evita alimentar a las ardillas salvajes con dulces, comida basura (como patatas fritas), pan o alimentos procesados; todos estos tipos de artículos contienen aditivos poco saludables que pueden enfermar a los animales con el tiempo. Es mejor ceñirse a alimentos naturales como frutos secos, frutas y verduras para una nutrición óptima.

PREGUNTAS FRECUENTES

¿Está permitido dar comida a las ardillas que viven en un patio trasero?

En general, no se recomienda alimentar a las ardillas que viven en el patio trasero. Hacerlo puede disminuir su miedo a los humanos, con el consiguiente peligro para ambas partes. Además, puede provocar un aumento de la población de ardillas debido a la dependencia de las limosnas humanas. Por estas razones, es más beneficioso abstenerse de alimentarlas.

¿Puede ser aceptable dar comida a las ardillas?

Alimentar a las ardillas salvajes puede tener efectos positivos y negativos. En el lado positivo, nos permite observarlas y apreciarlas desde cerca. Sin embargo, también hay algunos inconvenientes que hay que tener en cuenta. Alimentar a las ardillas puede animarlas a depender de los seres humanos para alimentarse, lo que puede conducir a una superpoblación. Esto puede causar conflictos con las personas, así como perjudicar a las propias ardillas al perder su astucia y volverse vulnerables a los depredadores.

Por tanto, es mejor pensárselo bien antes de alimentar a las ardillas salvajes. Si decides alimentarlas, hazlo con moderación y sigue los consejos de las organizaciones de animales salvajes, como la Sociedad Humanitaria de Estados Unidos.

¿Con qué frecuencia hay que dar comida a las ardillas?

No se debe alimentar a las ardillas con regularidad, sino darles golosinas de vez en cuando. Es importante recordar que, aunque puede ser divertido dar de comer a los animales salvajes, hacerlo puede crear dependencias malsanas y dar lugar a problemas adicionales. También debes tener en cuenta tu seguridad y la de las ardillas al decidir si les das comida.

¿Cómo puedo reducir con el tiempo la cantidad de comida que doy a las ardillas?

Para dejar de alimentar gradualmente a las ardillas, es importante hacerlo de modo que no les cause daños innecesarios. Una forma de hacerlo es reducir primero la cantidad de comida que se da a las ardillas durante un periodo de tiempo. Luego, una vez que los animales se hayan acostumbrado a recibir raciones más pequeñas, lo mejor es dejar de alimentarlos por completo. También es importante recordar que no hay que darles golosinas ni restos de comida, sino dejarles fuentes naturales de alimento, como nueces y bayas, para que las ardillas las encuentren por sí mismas.

¿Es seguro dar comida a una ardilla salvaje?

Alimentar ardillas salvajes puede ser una experiencia gratificante, pero es importante ser plenamente consciente de los riesgos. Las ardillas que se acostumbran a las personas pueden perder el miedo y volverse excesivamente dependientes de las limosnas, lo que conduce a una superpoblación de la especie. Además, algunos alimentos que son seguros para los humanos pueden no ser saludables para los animales, por lo que es mejor investigar primero qué es adecuado. Por tanto, se aconseja que, aunque puede ser agradable alimentar a una ardilla salvaje, hay que tener cuidado para garantizar su seguridad, así como la salud del entorno.

¿Se volverán las ardillas dependientes de la comida humana si se las alimenta con regularidad?

Alimentar a las ardillas puede hacer que se vuelvan dependientes. Esto se debe a que, con el tiempo, las ardillas pueden perder su miedo natural a los humanos y empezar a depender de ellos para alimentarse. Siempre que sea posible, se recomienda alimentar a los pájaros, ya que así tendrán una dieta más natural sin riesgo de crear una población excesivamente dependiente.

Conclusión

La alimentación suplementaria de ardillas salvajes, como alimentarlas, puede tener resultados peligrosos si se hace incorrectamente. La habituación puede hacer que se vuelvan demasiado dependientes y atrevidas con los humanos, lo que puede provocarles lesiones o incluso ataques. Aunque puede resultar tentador alimentar a estos animales, es importante recordar que lo mejor es no alimentar ni engatusar nunca a los animales salvajes.

En conclusión, cuando decidas dar de comer a ardillas salvajes, o a cualquier otro animal salvaje, es importante que tengas en cuenta las consecuencias de tus actos. Hacerlo podría poneros en peligro tanto a ti como al animal, por lo que es mejor dejar en paz a los animales salvajes y apreciarlos desde la distancia.